¿Qué debe tener una página web para ser exitosa?

Las páginas web son centros de información, interacción y comunicación para tu marca.

Es tu casa digital en donde invitarás a pasar a tu cliente ideal, le invitarás a tomarse un café contigo y mantendrás con él una plática cercana en la que le hablarás de ti (como marca) y de tus productos o servicios.

Una página web debe ser tu clon digital trabajando 24 x 7 los 365 días del año.

Pero para que realmente logre el objetivo esperado, que no es otro a que te ayude a vender, debes dar el mensaje correcto y justo ese es el propósito de este artículo que por bonita fortuna se ha topado contigo.

A continuación, te voy a dar los 3 ingredientes que no pueden faltar en los textos de tu página web por nada de este mundo. Porque son ellos quienes te ayudarán a convencer a ese lector que sueñas conquistar.

En este artículo te encontrarás con:

 

⇒Punto de dolor 

⇒La promesa 

⇒El beneficio

⇒Súper bonus: Plantilla GRATUITA “Tips persuasivos para tu página web”

    Pero antes de comenzar por ellos, quiero explicarte por qué son tan importantes en la comunicación de tu web.

    Para convencer a un cliente potencial de que eres tú o tu equipo la mejor opción para él, primero debemos lograr que ese lector entienda que tiene un problema, se identifique con ese problema e imagine su vida sin este inconveniente que tantas molestias podría ocasionarle.

    Para ello nuestra fuente de infinita sabiduría (el neuromarketing) nos habla de estas 3 perlas como los elementos más estratégicos para conseguir esa venta que tanto deseamos.

    Sin más, vayamos a los ingredientes:

    1. El punto de dolor (pain point):

    El punto de dolor es el o los problemas con los cuales lidia tu cliente ideal. Son circunstancias que le desagradan, le molestan, le incomodan, le preocupan y que podrías solucionar con tus productos o servicios.

    Por ejemplo:

    Punto de dolor Solución con un producto o servicio
    No cumplir los objetivos de una empresa pequeña o mediana por tener una agenda desordenada y sujeta a constantes improvisaciones.

     

    Servicio: Asistencia y secretaría virtual

    Sentir miedo, inseguridad y desorientación en el proceso de embarazo. Servicio: Acompañamiento de Dulas.
    Invertir demasiado tiempo en la preparación de comidas poco saludables para los miembros de tu familia y quedar sin disponibilidad para otras tareas igualmente importantes. Producto: Taller online y recetario de comidas saludables y de fácil y rápida preparación pensado en familias multitareas.

    ¿Lo ves?

    Para entender al punto de dolor, primero debemos pasearnos por el primer mandamiento de las ventas:

    Ayuda a tu prójimo

    Y es que vender significa AYUDAR.

    Este cambio de paradigma puede pasar desapercibido, e incluso romantizarse, pero es la razón de ser de una venta. Y entenderlo (créeme) hace la diferencia.

    Cuando comprendes que en realidad (con tu producto o servicio) le estas resolviendo un problema o satisfaciendo un deseo a tu cliente, dejas de ofrecerlo con la inseguridad de quien pide un favor. Algo más o menos así:

    Hola, ¿Sabías que tengo algo que quizá pueda ayudarte? Si tienes tiempo y te apetece, puedes venir a visitarme y te lo muestro. Sin compromiso

    Esa es la actitud de quien tiene algo para vender, pero siente que su cliente potencial le haría un súper favor al comprarle.

    Imagínate que te llega un vendedor con esa actitud. ¿Confiarías en la calidad de lo que te ofrece?

    Yo no.

    Ahora, démosle la vuelta a la tortilla. Un líder de negocio que está súper claro de lo VALIOSO que son sus productos o servicios para la vida de su cliente. Y con valioso me refiero a que está seguro de que la vida de ese cliente sería más fácil, o más segura, o más cómoda, o más placentera si comprara o contratara los productos o servicios que ofrece.

    Esta oferta se haría con una seguridad como esta:

    Este _____________________ (tu producto o servicio), tiene el poder de transformar tu situación. Esa misma que tanto deseas cambiar desde hace bastante tiempo

    ¿Quieres ver un ejemplo?

    Imagina que ofrecemos zapatos deportivos para mujeres.

    Χ Venta insegura que NO reconoce el problema o punto de dolor que está resolviendo:

    “Tengo unos zapatos deportivos bonitos que quizá te puedan gustar”

    Venta segura que SÍ identificó el problema que puede resolver:

    “¿Te pasa que hay dias en los que no te apetece (ni en lo más mínimo)  entaconarte y, aun así, seguir luciendo hermosa?

    ¿Por qué una cosa tendría que ser excluyente de la otra?

    Con nuestra última colección de deportivos tienes lo mejor de ambos mundos: Porque sí, puedes ser una diva y estar cómoda AL MISMO TIEMPO

    Ok, entonces aterrizando lo que ya hemos conversado:

    Identifica el problema o punto de dolor que, a tus clientes, les estás resolviendo o ese deseo que le estas satisfaciendo.

    Reflexiona en cómo está mejorando su vida, o su día con tus productos o servicios.

    Ojo: Puedes resolver un problema financiero, legal o médico o puedes también atender un antojo de media tarde.

    Nada es demasiado grande o demasiado pequeño para las ventas. Un buen cupcakes puede también ser recibido como un milagro si llega en el momento correcto.

    2. La promesa

    Ahora vamos con la promesa.

    Una vez que ya tengas identificado el o los puntos de dolor que atiendes con tus productos o servicios, construir tu promesa se te convertirá en un paseo en bici y colina abajo.

    La promesa es en lo que se convertirá tu cliente una vez te haya comprado o contratado.

    ¿Has visto los famosos “antes y después”?

    Eso es una promesa. Es lo que logrará tu cliente con lo que le ofreces. Es la razón de ser de tus productos o servicios. Es el impacto para lo cual los creaste.

    Tu promesa de venta es la versión mejorada que conseguirá tu cliente. Una que ya no padece ese problema que lo agobiaba, ni tampoco tiene ese deseo en lista de espera.  ¿Sabes por qué? Porque contigo ya lo resolvió.

    Para conseguir tu promesa, puedes usar la fórmula del “antes y el después”. Es una de las más sencillas de ver.

    Para lograrla:

    1. Describe quién es tu cliente antes de ti (con sus problemas, con sus temores)
    2. Describe quién es ahora, luego de haber disfrutado de tus productos o servicios.

    Toma en cuenta identificar de qué modo ahora su vida o sus días son más sencillos, más confortables, más divertidos, más deliciosos, más seguros, más ordenados, etc…

    1. Y por último responde a esta pregunta: ¿Qué logró contigo?

    Allí, la tendrás.

     

    3. Los beneficios

     

    El beneficio es la cereza del helado.

    Ok, tu potencial cliente ya sabe que lo que le ofreces puede generar un cambio positivo en su vida. Ahora ¿Por qué debería comprarte a ti?

    Es el momento de sacar tu última carta bajo la manga. Tu elemento diferenciador: El beneficio.

    Es la oportunidad de oro que vas a tener para terminar de demostrarle a tu cliente que eres tú la respuesta para su necesidad.

    Es la satisfacción, es la tranquilidad, es la recompensa de haberte elegido a ti y es quien dará la última estocada en este hermoso y estratégico coqueteo que tendrás con tu cliente ideal.

    Los beneficios representan la ganancia final que obtendrá tu cliente contigo y será el último empujón que necesitará para decir “Sí, lo quiero / lo necesito”, porque es quien da la percepción de valor.

    ¿Sabes por qué?

    Porque el beneficio CONVENCE.

    El beneficio es ese algo que tu cliente potencial siente que merece la pena como:

    • Tener tranquilidad financiera
    • Ahorrar o ganar dinero
    • Ahorrar tiempo.
    • Ser feliz.
    • Ser saludable
    • Hacer amigos.
    • Conseguir la casa perfecta
    • Ser respetado
    • Cuidar y consentir a tu familia.
    • Conseguir el cuerpo perfecto.
    • Lucir bien…

    Ok, ahora ¿Cómo sacarles jugo a tus beneficios en tu página web?

    1. Identifica el beneficio WOW o gran beneficio que ganarán tus clientes con tus productos o servicios
    2. Identifica 3 o 4 beneficios segundarios.

     

    Y cada vez que tengas la oportunidad de hablar de lo que ofreces, usa esta secuencia súper PODEROSA:

    Comienza por

    1. Los puntos de dolor que tocas
    2. La promesa que cumples
    3. Y los beneficios que ganarán al elegirte a ti.

    ¡Y VOILÁ!

    Y como bonus, te dejamos una plantilla GRATUÍTA que podrás descargar YA, en donde encontrarás tips persuasivos que le darán picante a tu página web y harán a tus productos o servicios más apetecible en tus textos.